Muchas veces no me entendi a mi misma, y pretendi que los demas lo hicieran.
Me agotaba todo y la nada misma, me canse de ser la persona que siempre estaba ahi, la que todos recurrian y estaba siempre apoyando a los demas.
De luchar e insistir con imposibles, me canse de ser la que lo daba todo por completo y a la que herian por ello.
Odiaba no sentirme capaz de estar satisfecha y feliz, de no encontrar paz.
Tenia miedo de volverme una persona fria e insensible, de dejar pasar la vida, por no desprenderme de situaciones y personas toxicas, con personas que no valian ni un minuto de mi tiempo.
Deseaba todo, pero no tenia nada, me senti cansada y vacia, sola y muchas veces frustrada.
Si frustrada, por muchas cosas que sabia claramente que no me merecia, pero que aun asi las tenia y no sabia como cambiarlas.
Cai muchas veces en dias tristes , mi vida se encontraba vacia y rutinaria.
Llegue al punto maximo que puede tener una persona, que es no apreciar nada de lo que me rodeaba, todo era gris y no habia nada positivo, tenia mas angustias que alegrias, el corazon hecho pedazos y miles de lagunas en mi cabeza que no me dejaban en paz, el dolor pesaba en mi espalda y no me dejaba avanzar.
Muchas veces crei que el darme por vencida seria mi mejor opcion, hasta que un dia entendi algo.
Descubri que talvez yo no me queria tanto, no me estaba valorando a mi misma, al dejarme a mi misma estar asi.
Aprendi que nadie te puede salvar, ni ayudar, si tu no quieres que lo hagan, pero que si hay personas que te pueden mostrar que no todo es tan malo como lo sientes, que pueden aliviar un poco la carga y el dolor y que te abren de par en par el corazon y que te ayudan a revivir.
Que te borran la soledad y solo te dan paz.
Ahora se, que son esas personas a las que necesito
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