El dia que se fue

¿ Que abrazas?

Nada, pero todo.
Nada puedes sostener entre tus brazos , y sin embargo te imaginas su ser.

Imaginas el amor contenido en ese pequeñito espacio  que ahora esta vacío, que en realidad no lo está porque hay cariño, hay sueños, hay una vida que pudo ser y no fue.
Eso sí ocupa espacio.

No es solo la vida, la que se va.
No es solo un cuerpecito de pocas horas, días o que ni siquiera nació, es todo lo que iba a ser y no pudo ser.

Es lo que se pierde, por eso el sufrimiento.
Porque se va la que iba a ser una nueva vida, una personita que iba a crecer en ti , que iba a ocupar un espacio en la vida de su madre, emocional y físico, que iba a compartir emociones, tiempo, responsabilidades, que iba a crecer a través de ella..

Todo eso nunca será, pero sí lo fue en la mente de su madre. Ella sí lo soño. Ella sí lo imaginaro.
Y cuando el destino se lo arranca de golpe, el vacío es tan grande que duele, y duele mucho.

Pero la gente no piensa en eso.
No suele hacerlo.
Sólo se centran en lo que se ve, en lo que se palpa, en lo que llega por sus sentidos.
Si lo ven, existe.
Si no lo ven, no.
Si comparten espacio y tiempo, pueden amar.
Si no, ¿cómo hacerlo?
Eso se preguntan: ¿cómo vas a amar a un bebé que apenas has conocido? ¿Cómo aferrarte al cariño por un feto que no ha salido adelante?
¿Por qué?
"Claro que duele", te dicen:

"pero tienes que seguir adelante y dejarlo atrás".
Y luego vienen todas las frases que tratan de minimizar el problema para que tú también lo minimices, y para que banalices tu sufrimiento:
"no eres la única",
"eres joven",
"será que no tenía que nacer",
"mejor ahora que más tarde",
"pasa página", "
ni siquiera lo conocías", etc.

Es que una pérdida no acaba en el momento que se produce, sino todo lo contrario.
Ese es el momento en el que todo empieza.

Negro

Hubo un momento de mi vida, en el que todo era negro, porque para gris se quedaba corto,,, realmente mi vida era toda desgracia, desilusión y momentos amargos. 

En ese momento duro, aprendi sobre muchas realidades y prioridades. 

Aprendi que lo que realmente era perder,  lo que yo creí que eran perdidas, realmente eran tonterias. 

Perder no eran las chiquilinadas por las que me preocupaba,  el aprender lo que era el dolor de perder, fue cuando supe que estaba teniendo un aborto y no habia solución. 

Fue tan duro y doloroso que crei no resistir, porque aunque fuera un mes, era mio,mi sangre,mi pedacito. 

Aprendi también el valor del amor, y eso que crei que sabia varias definiciones de el,pero siempre hay alguien que te enseña aun mas.

Me enseñaron a no confiar en mas palabras dulces si no traen hechos que las acompañen.  

A no creer en promesas que no se materializan .

Pero principalmente en no darlo todo desde el momento cero. 

Sino que luchen por ello y que sea recíproco. 

Y tambien me enseño que si amas a alguien de manera sincera ,es lo que vale.

Y que no solo era yo la que perdia.

Aprendi a perdonar las carencias y las personas que me hirieron. 

Porque si alguna vez amaste, sabes que el rencor hacia esa persona no.es verdadero.

Porque no todos estamos preparados  para algunas cosas y situaciones de la vida.

Por eso preferi perdonar y no juzgar.

Aprendi tambien a amarme y cuidarme.

A ser valiente y cuidadosa conmigo misma.

Fui tan fuerte que muchas veces no supe como lo hacia. 

Aprendi a luchar contra una enfermedad grave, la perdida de un hijo,  y la depresion mas grande de mi vida,de una manera que al dia de hoy,  no encuentro la explicación de no haberme derrumbado ni enloquecido. 

Porque imagina que estas perdiendo todo, en menos de 15 dias.Quedas sin rumbos,sin una explicación.

De tanto que me paso ,llegue a pensar a veces  que el mas chico de mis males en ese momento fue la recaida de la anorexia.

 Y si recaida segura era. Estaban todos los números a mi favor. 

Pero esta vez fue diferente,  porque esta vez tome la decision a tiempo,esta vez me interne y luche, y no la deje avanzar. 

Luche contra ella y contra mi negro panorama. Pero también perdone para sanar,  para poder seguir y estar sana.

Y gracias a todo eso pude salir adelante,  como la mujer que hoy soy, aprendi que aunque duelan hay muchas situaciones que vienen a enseñar , a prepararnos para mejorar, aunque sean demasiado duras. 

Me convertí en mujer mas dura y madura que jamas pense llevaria a ser.

Aprendi principalmente a creer en mi y a confiar en mi poder, mi fortaleza. 

A amarme y sobre todo cuidarme y respetarme.